Santiago 15 Oct. (ATON) -
El ministro de la Corte Suprema, Sergio Muñoz, declaró hoy frente al Senado por la acusación constitucional en su contra por la presunta entrega de información privilegiada a su hija para definir su participación en un proyecto inmobiliario, de la cual negó los hechos imputados en la Sala durante su defensa.
Señor presidente, agradezco por la invitación que usted me cursó para asistir a esta sesión. Lo hago no solamente para defender la inamovilidad de este juez, sino también para defender mi honra que pretende ser mancillada, que en realidad ningún hecho inefectivo podrá afectarla , manifestó Muñoz.
En este contexto, Muñoz expresó que asistió en persona con la convicción de que el honorable juez, el señor Presidente, y el honorable Senado escucharán y evaluarán las argumentaciones de mi defensa y, solo entonces, tomarán una decisión consciente sobre la acusación presentada en mi contra .
Es esencial de la democracia hace ver el peligro que corren los juicios políticos señalando que, comillas, en esas ocasiones se correrá siempre un gran peligro de que la decisión esté determinada por las fuerzas comparativas de los partidos, en mayor grado que por las pruebas efectivas de inocencia , agregó.
El magistrado enfrenta acusaciones por haber proporcionado información a su hija para que decidiera su participación en un proyecto de la inmobiliaria Fundamenta.
Específicamente, la jueza del 12° Juzgado de Garantía de Santiago, Graciela Muñoz, informó a una ejecutiva de la compañía que no seguiría adelante con sus inversiones en los inmuebles porque su padre, en su calidad de juez de la Corte Suprema, le advirtió que las construcciones se retrasarían debido a una tramitación en el máximo tribunal.
Muñoz también enfrenta otro cargo relacionado con su hija: no haber denunciado la falta disciplinaria que ella cometió al declarar que estaba trabajando desde su residencia, cuando en realidad lo hacía desde Italia durante la pandemia. Esto está prohibido por el Código Orgánico de Tribunales, que estipula que los jueces deben residir en la jurisdicción de su tribunal.