Santiago, 9 de Octubre. Marjorie Rodríguez Osses.
La esperada secuela El Joker 2: Folie à Deux, dirigida por Todd Phillips y protagonizada nuevamente por Joaquin Phoenix y acompañada esta vez por Lady Gaga, ha sorprendido al mundo del cine, pero no por las razones que muchos anticipaban. Pese a la enorme expectativa generada tras el éxito monumental de la primera entrega, la película ha resultado ser un fracaso tanto en taquilla como en recepción crítica, lo que ha generado pérdidas significativas para Warner Bros.
Con un presupuesto de más de 200 millones de dólares, El Joker 2 apuntaba a ser uno de los grandes estrenos del año. Sin embargo, tras su lanzamiento, la película ha recaudado menos de lo esperado en sus primeras semanas, enfrentando una dura competencia y una baja afluencia de espectadores.
¿Por qué El Joker 2 no funcionó?: Expectativas altas, resultados bajos
Uno de los factores clave detrás del fracaso de El Joker 2 es la enorme expectativa que generó. La primera entrega, además de ganar múltiples premios, incluyendo el Oscar al Mejor Actor para Phoenix, había establecido un estándar altísimo. El tono sombrío, la profunda exploración psicológica y la crítica social hicieron que los fanáticos esperaran una secuela aún más intensa y provocativa. Sin embargo, El Joker 2 no logró capturar esa misma esencia. Muchos críticos señalaron que la película se sintió forzada, sin la autenticidad que definió a la original.
Además, uno de los puntos más controvertidos fue la arriesgada decisión del director de incluir elementos musicales en la narrativa, un giro que rompió con el tono oscuro y serio de la primera película. Aunque esta mezcla de géneros intentó ofrecer una nueva perspectiva, muchos fanáticos y críticos no encontraron coherencia entre los números musicales y el estilo oscuro que definió el éxito de la primera entrega. Esta desconexión generó una respuesta fría por parte del público, que esperaba una secuela con la misma intensidad emocional y crítica social que la original.
Además, la química entre los protagonistas, Phoenix y Gaga, ha sido objeto de debate. Mientras algunos elogiaron las actuaciones individuales, la dinámica entre sus personajes no logró capturar el mismo magnetismo que hizo de Joker (2019) un fenómeno cinematográfico. La esperada interpretación de Lady Gaga como Harley Quinn no alcanzó el impacto que muchos anticipaban, y la relación entre Joker y Harley, que debía ser un motor central de la trama, fue decepcionante para muchos críticos.
Con este revés, el futuro de la franquicia queda en duda, y Warner Bros. enfrenta la tarea de reevaluar cómo gestionar secuelas de alto presupuesto en un entorno de mercado donde el público parece estar cada vez más exigente. El Joker 2: Folie à Deux pasará a la historia no solo como una ambiciosa secuela, sino también como un recordatorio de que no siempre las segundas partes son buenas.