MÉXICO DF, 28 Nov. (Reuters/EP) -
Un tribunal estadounidense ha acusado este miércoles a dos exfuncionarios del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) de México por fraude, robo y transferencia ilegal de fondos, tras la incautación de millones de dólares que se cree habrían robado. Sin embargo, las autoridades estadounidenses desconocen su paradero.
La acusación por cuatro cargos en una corte de Texas contra Héctor Javier Villarreal, exsecretario de Finanzas en el estado de Coahuila, y Jorge Torres, un exgobernador interino, es la primera a la que los políticos se enfrentan en Estados Unidos.
Ambos trabajaron durante el mandato de Humberto Moreira en la gobernación de Coahuila, entre 2005 y 2011, quien era un aliado del actual presidente Enrique Peña Nieto antes de su triunfo las elecciones presidenciales de 2012.
Moreira le entregó el cargo de gobernador a Torres para asumir la presidencia del PRI cuando el partido todavía estaba en la oposición. Sin embargo, salió del cargo a finales del 2011, después de que se supiese que dejó fuertemente endeudado al Ejecutivo local.
Se sospecha que Villarreal y Torres blanquearon más de dos millones de dólares (unos 1,47 millones de euros) cada uno hacia cuentas bancarias en Bermudas y mintieron sobre el origen del dinero, según ha afirmado en una declaración Kenneth Magidson, abogado del distrito de Texas.
Los fiscales estadounidenses acusan a ambos exfuncionarios de usar cuentas bancarias en Texas para canalizar los fondos desviados hacia Bermudas. Villarreal se encuentra fugitivo desde hace más de un año y medio, mientras que ha negado las acusaciones en su contra a través de la prensa.
De ser condenados por fraude bancario, la acusación más grave, cada uno podría pasar hasta 30 años en prisión y enfrentar abultadas multas.