MADRID 12 May. (EUROPA PRESS) -
El emprendedor tecnológico Mike Lynch, quien llegó a ser conocido popularmente en Reino Unido como 'el Bill Gates británico', ha sido extraditado a Estados Unidos donde deberá afrontar los cargos contra él en relación con la venta en 2011 de su empresa de software, Autonomy, a la multinacional Hewlett-Packard (HP) por más de 11.000 millones de dólares (más de 10.000 millones de euros).
El emprendedor habría llegado ayer a Estados Unidos, según confirmó el Ministerio del Interior británico a la cadena británica BBC, después de que hace un mes el Tribunal Supremo de Reino Unido rechazase su apelación. Lynch está acusado por las autoridades estadounidenses de más de una decena de cargos, incluyendo haber cometido fraude en la transacción inflando el valor de la empresa de software, algo que el empresario siempre ha negado.
"El 21 de abril, el Tribunal Supremo rechazó el permiso de Lynch para apelar su extradición. Como resultado, se aplica el plazo legal normal de 28 días para la entrega a los Estados Unidos", indicó el Ministerio del Interior.
El empresario británico se enfrenta a una sentencia de hasta 25 años si finalmente es declarado culpable. En la actualidad, Sushovan Hussain, exdirector financiero de Autonomy, está cumpliendo una condena de cinco años en los EE.UU. tras ser declarado en 2019 culpable de fraude.
Tras su llegada a Estados Unidos, Lynch, de 57 años, asistió a una audiencia de lectura de cargos en la que se le impuso una fianza de 100 millones de dólares (91,4 millones de euros) para ser liberado bajo condición de arresto domiciliario, según explicó a la cadena CNBC un portavoz del acusado.
"La fianza establecida por el tribunal de los EE.UU. es extraordinariamente alta para los estándares del Reino Unido y es un claro ejemplo de los diferentes enfoques de los EE.UU. y el Reino Unido cuando se trata de procesar acusaciones de delitos de cuello blanco", dijo a la emisora Thomas Garner, socio de extradiciones del bufete de abogados Fladgate.
En enero del año pasado, el Tribunal Supremo del Reino Unido dio la razón "sustancial" a Hewlett Packard Enterprise en su reclamación civil de que Michael Richard Lynch, fundador de Autonomy, y Sushovan Tareque Hussain, director financiero de la empresa, cometieron fraude al inducir a la compañía estadounidense a adquirir en 2011 la empresa británica por 11.100 millones de dólares.
Tras la sentencia, la entonces ministra el Interior del Reino Unido, Priti Patel, aprobó la extradición de Lynch a los EE.UU.
HP sufrió pérdidas multimillonarias en su ejercicio 2012 tras registrar depreciaciones de 8.800 millones de dólares (8.045 millones de euros) en relación con "graves incorrecciones contables, fallos de información y distorsiones directas" en Autonomy Corporation.
A este respecto, la multinacional estadounidense informó entonces a la Oficina de Fraudes Graves de Reino Unido y al Departamento de Justicia de EE.UU., así como a la Comisión del Mercado de Valores (SEC) acerca de las "incorrecciones contables, fallos y tergiversaciones" en Autonomy antes y en relación con su compra.